lunes, 1 de noviembre de 2010

Nadie me había preguntado como pensaba morir, siempre hacen las típicas preguntas como, que voy a ser de mayor, que sabor de helado es mi favorito o simplemente un ¿Qué tal?; Estaba todo totalmente a oscuras parecía una habitación grande, mas bien parecía un pasadizo, lo único que podía ver era el destello de una luz que había detrás mía, era muy intensa y blanca con unos pequeños matices violetas por alguna razón no lograba conseguir darme la vuelta para mirarla fijamente, algo me lo impedía como si estuviese atada y no dejase que mi cuerpo reaccionara, la única parte de mi cuerpo que tenia movilidad eran mi brazo derecho, palpe rápidamente mi cuerpo, pero no encontré nada que justificase mi estado de inmovilidad, de nuevo me fije en el destello de aquella extraña pero familiar luz y vi como pasaba la sombra de algo que no conseguí distinguir entre animal o humano, entonces esa sombra se acerco a mí, me sorprendí al darme cuenta de que iba tan rápido que no me dio tiempo a reaccionar cuando sentí  que estaba a un metro de mi, oía su respiración profunda, eso fue lo único que pude observar de aquel ser que no tenia ni la remota idea de que era, entonces sentí como me empujaba y caí al frente, era como si me tirasen por el “Empire State” y al final de pronto supe lo que me esperaba, una gran balsa de agua helada a punto de congelarse, tan profunda que por mucho que nadase no conseguía encontrar el fondo, era tal mi agobio cuando llevaba ya unos segundos nadando intentando encontrar algo y de pronto visualice el cuadro que hice cuando tenia 7 años este me avergonzaba pero mi madre insistió en colgarlo enfrente de mi cama para que cuando despertase lo primero que viese fuera aquella niña jugando con su madre al lado, ella decía que así recordaría siempre lo valiosa que es la infancia y siempre conservaría una parte de mi niñez. Entonces supe que nada mas que se trataba de un mal sueño, ese sueño que se repetía varias noches al año, no se muy bien porque pero así era, cogi el despertador de mi mesita de noche y lo pare ya que todavía no había sonado y no tenia ganas de despertar a Claudia mi hermana menor, “mi egocéntrica preferida”.

3 comentarios:

  1. Me gusta un montón el texto, está super bien

    ResponderEliminar
  2. Hay sueños que cualquiera diría que los hemos vivido de verdad.
    Me gustaba bastante como escribes, te sigo. :)

    ResponderEliminar
  3. Me gusta el blog!
    Te sigo, me sigues? :) http://goodgirlsgonnagobad.blogspot.com/

    ResponderEliminar